No es un editorial de los tantos que hubo al ver contar millones de dólares y euros al hijo de un constructor-testaferro-acusado-de-lavado-de-dinero, se trata de la experiencia real de Néstor Morena, ex director comercial de Brinks y hoy consultor en transporte de caudales, que cuenta que al entrar a una bóveda con billetes viejos, las bacterias son capaces de generar un olor insoportable. Ésa y otras anécdotas de alguien habituado a andar entre montañas de billetes, en tiempos de fascinación televisiva por la guita.
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